La hipnosis es real | Mitos y verdades
Para John F. Kihlstrom la hipnosis puede ser definida como una forma de interacción social donde un sujeto responde a las sugestiones administradas por un hipnotizador que provocan cambios en la percepción, la memoria y la acción voluntaria.”
La definición que nos aporta Kihlstrom no se adapta a la gran cantidad de estereotipos que existen sobre esta famosa técnica. De hecho, podríamos decir, que la hipnosis no es mucho más que un conjunto de ejercicios imaginativos dirigidos, que provocan cambios a distintos niveles. Y aunque existen varias formas de practicar esta técnica, como es el caso de la Hipnosis Ericksoniana o la Freudiana, en el fondo, no dejan de compartir los mismos principios.
Es posible que lo poco que llevamos dicho no encaje con lo que se suele creer que es la hipnosis, y es normal, los medios de comunicación se han encargado de atribuirles una gran cantidad de propiedades casi mágicas a la Hipnosis, por lo tanto, antes de seguir, vamos a aclarar una serie de cosas:
MITO 1 “El hipnotizador podrá tendrá control absoluto sobre mis actos”
Esto es absolutamente falso y, además, hay que dejar bien claro que la persona tiene un papel completamente activo a lo largo del proceso, cómo ya hemos dicho ante esto se trata de un trabajo en equipo, donde tanto hipnotizador cómo hipnotizado trabajan para conseguir resultados
MITO 2 “Se puede hipnotizar a alguien en contra de su voluntad”
Sí es cierto que podremos utilizar las estrategias de comunicación fuera del contexto de hipnosis para mejorar la forma en la que nos entiende el resto, sin embargo, es imposible manipular a alguien con hipnosis. Y es que la persona que entra en hipnosis entra por sí misma de forma consciente.
MITO 3 “Dejaré de ser consciente de lo que pase a mi alrededor”
La persona que está bajo hipnosis simplemente está concentrada en lo que el hipnotizador está sugiriendo, sin embargo, es posible que se distraiga con el exterior o con sus pensamientos. Realmente no es distinto a cuando tratamos de mantener una conversación mientras hay música de fondo.
MITO 6“La Hipnosis ayuda a rescatar recuerdos perdidos”
Todo lo que se pueda rescatar mediante hipnosis podría ser rescatado mediante una entrevista cognitiva, el problema es que está muy extendido que bajo hipnosis lo que se recuerda tiene que ser real, por lo tanto, si por el motivo que sea, la persona bajo hipnosis rellena huecos de memoria en blanco, con lo primero que se le pasa por la mente, lo cual es bastante habitual. Tendrá la sensación de que ese recuerdo imaginado es una “realidad”.
MITO 7 “La hipnosis es peligrosa”
Cuando no es más peligrosa que un ejercicio de imaginación, lo que pasa es que en manos de charlatanes y vende humos, puede ser problemática e incluso iatrogénica, saliendo la persona de la sesión con problemas que antes no tenía. Y es que, por desgracia, también es habitual pensar que:
MITO 8 “La hipnoterapia es un tipo eficaz de terapia”
La Hipnosis tan solo es una técnica más, de hecho, no existe la hipnoterapia cómo terapia respaldada a nivel científico. Huid de todo lo que diga hipnoterapia, un psicólogo podrá hacer uso de la hipnosis clínica, pero también hará uso de otras técnicas y procedimientos, sin los cuales, nada de su trabajo tendría sentido.
MITO 9: La hipnosis está sólo al alcance de unos pocos
Todo el mundo puede ser hipnotizado, siempre y cuando no tenga algún tipo de problema neurológico que se lo impida. La hipnosis no deja de ser una habilidad y puede ser entrenada, aunque sí es cierto que habrá personas que tengan más facilidades que otras.
Por lo tanto:
¿La Hipnosis es real? Sí.
¿Es tan milagrosa como vemos en los medios de comunicación? Definitivamente no.
Sin embargo, sabemos que no podrás tener una idea clara de lo que es esta técnica hasta que no la pruebes por ti mismo/a. Por lo tanto, aquí te proponemos un ejercicios sencillo que podrás practicar en cuanto termines de leer esta entrada.
Siéntate o túmbate cómodamente y extiende las manos en paralelo y separadas a la altura de los hombros. Nota la sensación de tensión y de rigidez que tienes en los músculos y articulaciones, esto, te ayudará a imaginar que tus brazos son metálicos, imagina, que tus brazos son dos placas de metal puestas en paralelo.
Centra toda tu atención en esta imagen y recrea todos los detalles que puedas. A su vez, imagina que entre tus manos se sitúa un imán que gira y atrae tus manos hacia él.
Profundiza en el ejercicio imaginando desde las sensaciones que tendrías si tus manos se sintieran atraídas hacia el centro pasando por el sonido que podría hacer el imán hasta llegar a la forma y color del mismo. Hay personas que tienen muchas facilidades para imaginar los sonidos y sin embargo son incapaces de enfocar el ejercicio atendiendo a las sensaciones que podrían tener. Te animamos a que pruebes cuál es la forma que más te ayuda a ti.
